VERSOS SUCIOS

Nací de la rabia. Nací como a terapia de pareja y método de desintoxicación. Como a fórmula de rehabilitación. Como a base de realización personal de una mujer y un hombre con demasiados problemas. Nací porque mis pañales debían ocupar el lugar de la cocaína. La música alta. Las noches en vela. El tabaco industrial. Los tripazos. El whisky barato.

Vine a salvar el mundo. Pero los hijos de puta no veían que yo no tenía ningún poder. Yo no podía convertirme en una adicción. Ni en un antidepresivo. Ni en una puta polla de plástico enorme que solucionara sus problemas en la cama. Nací del odio. De un pacto que debía haberse roto antes de su inicio. Nací de la desesperación. De la ira. De la guerra. Como a fórmula de rehabilitación, método de desintoxicación, terapia de pareja. Como si hubiesen podido tomarme en comprimidos para amansar su mierda. Como a pasatiempo, como a juego, para llenar esas horas vacías en las que a uno de los dos podía darles por pensar. Joder. Creo que en ocasiones tengo complejo de polvo blanco, me consumen, me toman. Me soplan.

Pero vine a salvar el mundo.

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